Mi sueño

Madrid es un territorio curioso y escurridizo.Y yo vivo cansada y feliz.

No me importan las distancias, las esperas, las desesperanzas, los calores, los barrotes a los que me aferro en el metro. Me gusta este lugar macarra y espontáneo.

Pero sobre todo me gusta entrar cada mañana en el Prado, y ver a los guardias jugando al balón por los rincones y a los jardineros sentados a la fresca apurando un cigarrillo.
Me gusta el sonido de los caballetes que se despliegan al trabajo experto y entregado.
Me gusta el aspecto de mis manos sobre la madera envejecida y los pasillos sin esquinas de Moneo.

Es el museo de mis sueños.





Lienzos: Adam y Eva, Alberto Durero.