martes, febrero 27, 2007

Instantáneas





Cuando no hay nada, tú me encuentras otorgándome la tranquilidad forjada por leguas de piel y palabras.

Brindamos con el mismo vino tintado de las últimas horas sabiéndome partícipe de tus pensamientos y sabores sin el peso de todos los caminos medidos a razón del tic-tac de mis tacones.

Manos grandes e imágenes de cartón piedra, me gusta tu poesía de celofán, no lleva instrucciones y es tan caótica como amable.




La NüBe

5 Mordiscos:

Pedro M. Martínez dijo...

No sé si entiendo, si estoy en una página equivocada, si por aquí se llega a un cielo.
Sé que te leo y siento.
Gracias

tomatita dijo...

Gracias a ti.
Y ojalá no te equivoques nunca y el camino de baldosas te siga acercando este rincón repleto de humaredas.

Pedro, el placer es mio.

Eva

Jose Antonio Vallejo Serrano dijo...

Pues los chicos con manos grandes lo tienen todo igual...

Luis Guillermo Franquiz dijo...

He disfruta mucho con tus palabras, como siempre. Me encanta enredarme entre el hilar de tus letras, tan sugerentes. Gracias.

Para, creo que voy a vomitar dijo...

Qué sublime primer párrafo!!!Qué linda cara :)